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Receta de torrijas caseras

La receta de torrijas caseras son un postre tradicional español perfecto para disfrutar en cualquier época del año, pero especialmente durante la Semana Santa. Esta receta te guiará paso a paso para preparar unas deliciosas torrijas caseras, con un toque dulce y un interior suave y jugoso.

  • Corta la barra de pan del día anterior en rebanadas de aproximadamente 1,5 cm de grosor. Es importante que el pan esté un poco seco para que absorba bien la leche y no se deshaga al freírlo

  • En una cazuela grande, vierte la leche entera y añade el azúcar, la rama de canela y la cáscara de medio limón

  • Calienta la leche a fuego medio-alto hasta que comience a hervir. Luego, reduce el fuego y deja que la leche se infusiona con los sabores durante unos 10-15 minutos. Esto permitirá que los sabores se integren completamente en la leche

  • Una vez que la leche esté infusionada, retira la cazuela del fuego y sumerge las rebanadas de pan en la leche caliente

  • Deja que el pan se empape durante unos minutos, volteándolo ocasionalmente para asegurarte de que absorba suficiente líquido

  • Mientras el pan se empapa, bate los huevos en un plato hondo lo suficientemente grande como para que quepan las rebanadas de pan

  • En una sartén grande, calienta suficiente aceite de oliva suave a fuego medio para freír las torrijas. El aceite debe estar lo suficientemente caliente para que las torrijas se doren rápidamente, pero no tanto como para quemarlas

  • Una vez que las rebanadas de pan estén bien empapadas, sácalas de la leche y escúrrelas ligeramente para eliminar el exceso de líquido

  • Pasa cada rebanada de pan por el huevo batido, asegurándote de cubrir completamente ambos lados

  • Fríe las rebanadas de pan empanizadas en el aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes por ambos lados, aproximadamente 2-3 minutos por cada lado

  • Una vez que las torrijas estén doradas, retíralas del aceite y colócalas sobre papel de cocina para escurrir el exceso de grasa

  • Espolvorea las torrijas con una mezcla de azúcar y canela mientras aún estén calientes para que se adhiera mejor
  • Si deseas añadir un toque extra de sabor, puedes espolvorear las torrijas con un poco de ralladura de naranja o limón antes de servirlas

  • Las torrijas son deliciosas por sí solas, pero también puedes servirlas acompañadas de una bola de helado de vainilla, una crema inglesa o una salsa de chocolate caliente para un postre aún más indulgente

  • Las torrijas son mejores cuando se sirven recién hechas, pero si te sobran, puedes almacenarlas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 2-3 días. Para disfrutarlas nuevamente, simplemente caliéntalas en el horno o en el microondas antes de servirlas

  • Si quieres añadir un toque creativo, puedes experimentar con diferentes infusiones para la leche, como vainilla, cáscara de naranja o incluso un toque de licor como el brandy o el ron

¡Disfruta de estas deliciosas torrijas caseras, un postre clásico que seguramente será un éxito en cualquier ocasión especial o simplemente como un capricho dulce para consentirte a ti mismo y a tus seres queridos!

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